Mientras la blanca luna creciente observa la calle,
la maldad comienza a despertar en el laberinto azul.
Ah, en esta Tierra llena de pecados, chico,
creemos, soñamos,
buscamos el lugar adonde deberían dirigirse las almas.
Ah, ¿cuánto, si la profunda oscuridad se volviese luz,
cambiaría el color del mundo? (Ah, algún día, seguro)
Ah, ¿cuánto, si resolvemos tantos acertijos,
se abrirá la puerta al paraíso?
Comencemos nuestro viaje, empecemos.
Todo el mundo está teniendo una larga pesadilla.
Algún día te acostumbrarás a ella, como si te hubiese envenenado.
Ah, desde este lugar lleno de caos, chico,
volamos, despertamos,
desatadas las cadenas del ciclo infinito
de repetir errores.
Ah, ¿cuánto, si volvemos de un largo viaje,
entenderemos la filosofía de Dios? (Ah, algún día, seguro)
Ah, ¿cuánto abrirá la puerta del templo
la conciencia que viajó tanto tiempo?
Comencemos la leyenda del futuro, creémosla.
Si te vas, quiero seguirte, desenredando el misterio eterno.
Ah, ¿cuánto, si la profunda oscuridad se volviese luz,
cambiaría el color del mundo? (Ah, algún día, seguro)
Ah, ¿cuánto, si resolvemos tantos acertijos,
se abrirá la puerta al paraíso?
Comencemos nuestro viaje, empecemos.
Para Monika Hiwatari, que me la pidió hace algún tiempo.
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