Puedo sentir cómo crece,
empezando como una pequeña tormenta,
como un picor en los dedos de los pies.
Pero aumentará,
ni siquiera es tan pequeña.
Puedo sentir cómo crece,
puedo oír cómo gime,
puedo escuchar sus amargos lamentos.
Se arrastra dentro de mis venas,
se esconde bajo mi lengua,
me controla.
Un error en mi génesis
es la razón por la que comencé con esto.
¿Qué hemos hecho mal?
¿No lo sabes?
Al final, tus manos no son más fuertes,
tu corazón no es más fuerte.
¿No lo sabes?
Al final, nos destrozará trágicamente
si no podemos controlar esa tormenta.
¿Alcanza la furia
las puntas de tus dedos?
A mí tampoco me alcanza.
Convertir las manos en puños rabiosos,
en embravecida felicidad,
oh, ¿lo consigues?
Sollozando todas tus nanas,
¿te lames las heridas,
preguntándote cómo tratar de detener
esta batalla inútil?
Un error en mi génesis
es la razón por la que comencé con esto.
¿Qué hemos hecho mal?
¿No lo sabes?
Al final, tus manos no son más fuertes,
tu corazón no es más fuerte.
¿No lo sabes?
Al final, nos destrozará trágicamente
si no podemos controlar esa tormenta.
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