Copos de nieve que vuelan
por el cielo invernal, sin alas.
Como el elevado coro sin voz,
tampoco pueden cantar.
El tiempo fluirá eternamente
sin que nadie sepa
cuántos secretos quedan ocultos
en la nieve que cae.
Es una historia fría como el hielo
escrita en mi mano blanca como la nieve.
Y esta vieja, vieja historia
nunca tendrá fin.
Lirios brillantes se deslizarán
por mi ventana,
antiguos cuentos con final feliz
que me hacen llorar.
Hablar con el espejo
cuando nadie me escucha;
adiós, momentos solitarios
al bajar por las escaleras.
Es una historia fría como el hielo
escrita en mi mano blanca como la nieve.
Y esta vieja, vieja historia
nunca tendrá fin.
El muñeco de nieve bajo el manzano
nunca se derretirá.
Sus ojos vacíos me recuerdan
que así es como siempre me he sentido.
Oh, señor muñeco de nieve,
¿se casaría usted conmigo?
Volemos como copos de nieve
por encima del mar helado.
Aquí llega la primavera,
y siento en mi dedo
un anillo frío como el hielo.
Es una historia fría como el hielo
escrita en mi mano blanca como la nieve.
Y esta vieja, vieja historia
nunca tendrá fin.
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