Sí, es mortalmente aburrido,
no hay nada que motive.
No puedo evitar evadirme
de su eterno bla-bla-bla.
Lo tenemos todo, excepto la libertad.
"Dame más libertad".
En este pequeño reino, sigo soñando.
El reloj avanza
mientras monos de juguete
se pegan y después se lamen las heridas:
ese asqueroso juego que me pone enfermo.
Me siento así,
como una muñeca en el escaparate.
No estoy aquí.
"No pertenezco a este jodido lugar",
"No pertenezco a este jodido lugar",
"No pertenezco a este jodido lugar".
Sácame de aquí,
sácame de aquí,
sácame de aquí,
de este mundo de plástico,
y llévame al desconocido
País de las Maravillas,
eso es lo que grita mi corazón.
"Haz que pierda el control",
"Haz que pierda el control",
"Haz que pierda el control",
"Haz que pierda el control",
"Haz que pierda el control".
Sácame de aquí,
sácame de aquí,
sácame de aquí,
sácame de aquí
de este mundo de plástico,
y llévame al desconocido
País de las Maravillas,
eso es lo que grita mi corazón.
Ahora, abre la puerta
y grítale al mundo.
Así.
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