Perdona por el desorden,
no te he visto venir por detrás.
Te atisbé de reojo,
pero en el reflejo sólo estoy yo.
Es casi como si estuviera paralizado
y me viera desde fuera.
Lo que no tengo que hacer es rendirme,
porque no quiero ser otra persona.
No soy perfecto ni digo serlo,
y si eso es lo que pretendías,
lo siento mucho.
¿Qué tal una versión mejorada
de la persona que soy?
¿Qué tal una versión mejorada
que pueda comprender?
¿Qué tal una versión mejorada
de la persona que soy,
de mi aspecto, de mi forma de hablar?
¿Qué tal una versión mejorada de mí?
Perdona por el muro,
de vez en cuando lo levanto a mi alrededor.
La sombra plateada y el diseño son míos,
no es más que un laberinto
en el que me pierdo cada día.
Nunca parece desaparecer,
pero rezo por el día en que lo haga.
No soy perfecto ni digo serlo,
y si eso es lo que pretendías,
lo siento mucho.
¿Qué tal una versión mejorada
de la persona que soy?
¿Qué tal una versión mejorada
que pueda comprender?
¿Qué tal una versión mejorada
de la persona que soy,
de mi aspecto, de mi forma de hablar?
¿Qué tal una versión mejorada de mí?
Deja que sea consciente
de mis signos vitales
hasta que recupere el orden.
No hay comentarios:
Publicar un comentario