No hace tanto tiempo
que me bajé de tu espalda
y aterricé en un campo lleno de flores,
en el camino que habías preparado
para estos pies ligeros.
Madre,
siempre estoy contigo.
Estaré aquí para decirte adiós
cada vez que tengas que irte.
Oh, soy tú;
el cuidado, el amor, los recuerdos:
somos una sola historia.
Padre,
siempre estoy contigo.
Estaré aquí para decirte adiós
cada vez que tengas que irte.
Oh, soy tú;
el cuidado, el amor, los recuerdos:
tú siempre estarás en mí.
De camino a casa,
hemos escrito este verso
para vosotros.
Todo esto es para vosotros.
El trayecto ha sido sublime,
el viaje vertiginoso y la conducción, suave.
Tienes el corazón de un verdadero amigo,
algún día volveremos a encontrarnos
en esa orilla.
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